Protocolo 1


Protocolo N°1 de Meditación Comunitaria

Paso 1:
Siéntate en una silla o cojín, coloca tu espalda derecha y el mentón levemente recogido, los ojos cerrados y la mirada dirigida hacia las fosas nasales, la lengua colocada levemente entre los dientes y las manos sobre los muslos. Permite que tu cuerpo permanezca quieto y atiende a tu respiración, a las inhalaciones y exhalaciones. Concentrado en cada respiración, siente la parte más alta y profunda de las fosas nasales. Luego, cuenta mentalmente de una en una tus inhalaciones y exhalaciones, hasta completar 21 respiraciones. La forma de contar es 1-1, 2-2, 3-3 hasta llegar a 21-21, contando cuando el aire entra y repitiendo esa cuenta cuando el aire sale. Luego, se vuelve a comenzar a partir de 1-1. Mientras realizas esta concentración permite que tu mente descanse y se vuelva cada vez más serena.

Paso 2:
Luego, suspende la cuenta de las respiraciones y dirige tu atención a la parte alta de la cabeza (coronilla), hasta percibir allí una sensación de vibración, o de temperatura. Una vez “activada” la sensación de la coronilla, comienza a percibir el cuerpo, desde la cabeza a los pies, sintiendo las distintas sensaciones que surgen. La atención a las sensaciones corporales se realiza desde una disposición de ecuanimidad, es decir, sin apegarse ni rechazar ninguna sensación, observándolas con neutralidad y desapego. Mientras las distintas sensaciones corporales aparecen y desaparecen en la consciencia, poco a poco permite que se constituya una percepción cada vez más completa de tu cuerpo. Y una vez que has tenido una sensación completa del cuerpo permanece un rato sintiendo que dentro del cuerpo hay una Presencia que lo habita.

Paso 3:
Cruzando tus manos a la altura del esternón percibe unos instantes el movimiento del pecho al respirar. Sintiendo el espacio interior de tu pecho ten el pensamiento y deseo de que esta práctica nos haga bien a todos, que genere bienestar físico, emocional y espiritual para ti mismo y tus seres queridos, para esta comunidad, nuestro país y el planeta. Sostiene este estado serenidad y empatía en tu mente y corazón y permite que este sentimiento positivo se haga cada vez más intenso. Permanece un rato en recogimiento sintiendo la fuerza de tu intención. Pare terminar ten el pensamiento: “Que todos los seres tengan paz”.